Sara

Abrir una escuela de danza era mi sueño, siempre anhelé tener un lugar en el que pudiera impulsar a las demás personas a alcanzar los suyos, una especie de máquina en el que todo el que formara parte, recibiera lo necesario para alcanzar sus metas y el anhelo de su alma.
Al principio no imaginaba todo lo que implicaría hacelo realidad, pero estaba segura que sin importar los años o el trabajo que me llevara alcanzarlo, lo lograría.
A medida que pasaba el tiempo entre mis clases de baile, no importaba el género, ballet, jazz, contemporáneo, baile español o danza folklórica, la danza y la música llenaban mi cuerpo y mi alma. En los salones de clase descubrí que era el propósito de mi vida.
Mi visión siempre fue muy clara: Quería formar una escuela de danza, pero no cualquier escuela de danza, una de alto nivel dancístico que colocara a mi ciudad en la mira nacional e internacional a la par de que sus integrantes fueran creciendo como seres humanos integrales, desarrollar su pasión y alcanzar sus metas a través del lenguaje de la danza. Con este objetivo en mente, decido – después de terminar la Licenciatura en Comercio Exterior – estudiar en Paris, Francia, la Licenciatura en Artes de Espectáculo con especialidad en Danza y el Estudio de Pedagogía para la Danza Clásica por la que el Ministerio de la Cultura Francesa me otorgó un Diploma de Estado.
Francia me abrió las puertas a un mar infinito de posibilidades, me hizo descubrir nuevos horizontes mientras me brindaba un marco teórico e histórico acerca de lo que estaba pasando en el mundo de la danza, especialmente en el ballet clásico.
A mi regreso, en 2004, abro Corpus Danza materializando así un sueño de años, que me mantuvo firme a pesar de las dificultades y que le da, al igual que mi familia, un sentido a mi vida.
Me dediqué en cuerpo y alma a formar un equipo de trabajo apasionado, comprometido y muy profesional. Hoy estoy orgullosa de contar con este maravilloso equipo lleno de personas que aman lo que hacen.
Corpus Danza es el lugar es el lugar en donde produzco, creo y dirijo junto con mi equipo espectáculos únicos que mueven al espectador y que han sido nominados en tres ocasiones a las Lunas del Auditorio Nacional convirtiéndose en la única escuela de danza en México con esa distinción. Tenemos un lugar en el que la danza es el vehículo a través del cual formamos seres humanos integrales con valores y características positivas para el resto de sus vidas, sin importar que su objetivo no sea convertirse en un bailarín profesional.
Corpus Danza es una escuela de danza con prestigio nacional e internacional, donde creamos un camino lleno de oportunidades para quienes  buscan convertirse en bailarines profesionales.
Pero sobretodo, Corpus Danza es una gran familia, es la prueba de que los sueños se cumplen y que las metas se alcanzan , no como una serie de eventos fortuitos, sino a través del trabajo duro, de años y años de esfuerzo, dedicación, de retos, experiencias y satisfacciones.
Corpus Danza es hoy el sueño compartido de muchos, quienes al igual que yo creemos en el poder que tienen la danza y el arte de transformar la vida del ser humano.  
Corpus Danza es mi sueño hecho realidad.

Tengo muchos sueños y metas por cumplir que me motivan a seguir luchando y aprendiendo para lograrlos, cada día disfruto al máximo la oportunidad y el privilegio de vivir haciendo lo que más amo y lo que más me hace feliz, soy una persona muy afortunada que exprime la vida para sacar lo mejor de ella. Ahora, me encuentro estudiando la Maestría en Educación con Especialización en Danza (Royal Dance Academy en Londres, Inglaterra) y he iniciado la especialización de prácticas y educación somática.
Después de años de esfuerzo, en 2018 nace oficialmente la Corpus Dance Company.

Me considero una persona con mucha visión, con una capacidad para desarrollar y alentar a los demás a seguir sus sueños, una especie de guía y soporte a la que pueden recurrir en caso de necesitar ayuda, en ese sentido admiro el trabajo y la personalidad del gran Serge Diaghilev, un visionario bailarín, empresario, coreógrafo  y artista que marcó un antes y un después en la historia de la danza con su ballet Rusos, una compañía que reunió a los mejores pintores, bailarines, músicos y bailarines de su época como Pablo Picasso, George Balanchine, Stravisnky, entre muchos otros.
Amo la danza y amo la música, algunos de mis coreógrafos favoritos son: Pina Baush, Maurice Bejart, Jiří Kylián, Carolyn Carlson, John Neumeier, William Forsythe y Ohad Naharin.
Hay muchos bailarines que me inspiran, pero sin duda las historias de vida y el talento de la bailarina francesa  Sylvie Guillem y Rudolf Nureyev son un gran ejemplo  para mí.
Un libro que sin duda ha marcado mi existencia es el de Siddartha Gauthama “Buda” enseñándome entre muchas otras cosas que hay que vivir siempre ligeros de equipaje.